Buena
Luna, criaturas de la noche. Así era como el legendario director del Festival
de Cine de Sitges, Joan Lluis Goas, solía empezar un mítico programa de
películas de terror que se emitió los domingos en Antena 3 durante tres años
(1990-1993), se llamaba Noche de lobos.
Este programa no era como el Movie
Macabre que presentaba la fabulosa Elvira, no tendría un decorado macabro
con un cementerio o una mansión sucia y polvorienta como se veía en Historias
de la cripta o Noche de miedo, aunque su intro mostraba
un caserón con cancela tenebrosa incluida en cuyas ventanas se veían escenas de
pelis de terror (como Alien, Scanners, King Kong, Reanimator, Los Pajaros,
Desafío Total, Pesadilla Final: La muerte de Freddy, Fuerza Vital, La novia de
Frankenstein…), pero su decorado oscuro con una mesa de cristal de patas de
araña metálicas y su música de presentación al llegar Goas, que era el
inconfundible tema compuesto por John Carpenter La noche de Halloween, lo
hacía parecer algo más tétrico. Por aquella época yo no era más que un
renacuajo de seis añitos cuya madre no dejaba ver pelis de terror para evitar pesadillas
(bendita seas, mamá), sin embargo eso no me impidió poder verlas alguna vez, cuando
me quedaba a dormir con mis amados abuelos (a quienes echo mucho de menos). Pasé
años recordando esa intro, la cual creí que no volvería a verla nunca más
(gracias, youtube xoxo). Aunque Noche de lobos no era el único espacio que
presentaba películas de terror, thriller y ciencia ficción, también había otro
en la 2 de TVE conocido como Alucine,
no tenía presentador pero salían imágenes y escenas de algunas películas, como Pesadilla
en Elm street IV: El Señor de los sueños, por ejemplo. También ponían
muy buenas películas los sábados por la noche y solía verlas con mi
abuelo, dejó de emitirse en 1998.
Escribo
este blog con el propósito de averiguar a cuántos de vosotros os encantaría que
Antena 3 o la 2 volviesen a emitir esos programas los sábados por la noche
(para los que trabajan) y así conseguir que lo traigan de vuelta. Es cierto que
hay que vivir el presente, que hay que modernizarse y tal, pero eso no quita
que podamos disfrutar de clásicos de terror (y modernas también) los sábados
por la noche con estilo. Ahora en la televisión sólo ponen basura y cosas
aburridas: programas de cotilleos, reality shows, debates políticos… No quiero
sonar a anticuado, pero en los viejos tiempos ponían cosas mejores en la tele,
cosas que no destapaban los trapos sucios de la gente y en las que no había
tanto sexo y violencia gratuitas. Actualmente hay pocas cosas dignas que ver en
televisión y algunos prefieren descargarse películas, ponerse un DVD (o cinta
si aún conservan el VHS, como yo), escuchar la radio o, mejor aún, leer un buen
libro. Bueno, no nos desviemos del tema, si hay alguno que crea que esos
programas deberían regresar podría hacerse una recogida de firmas o se podrían mandar
tweets, emails o mensajes privados a ATRESMEDIA o a RTVE para convencerles de
que los traigan de vuelta.
¿Os
imagináis que le dieran un nuevo formato a alguno de esos dos programas? Como por
ejemplo que lo presentasen en un almacén de cintas sucio y polvoriento o en un
viejo videoclub cuyo dueño fuera un hombre mayor siniestro que recibe pocos
clientes debido a la piratería en internet y a la crisis (Muy pronto hablaré de
un fabuloso videoclub que todavía resiste en Barcelona y que necesita toda
nuestra ayuda para evitar el cierre). El cine es cultura, pero sobre todo un
medio de reunir a familias y a amigos socialmente, claro que las pelis de
terror no tienen porque ser para verlas en familia (a no ser que se sea la
familia Adams o los Munsters), pero muchas pandillas y parejas disfrutan con
ello reuniéndose por las noches y comiendo palomitas o una buena pizza de
pepperoni y salsa barbacoa (especialmente con la saga Pesadilla en Elm street
de Robert Englund…).
Si
no lo traen de vuelta podemos hacerlo más sencillo. Podríamos montárnoslo en
casa nosotros mismos, aunque sea cutre y algo infantil, pero puede ser
divertido. Lo más importante es saber divertirse.